Yo comprendo que en los Estados Unidos existe el multipartidismo y que cada uno tiene diferentes plataformas políticas para defender, lo que no es admisible es que se opongan a todos los resultados que emanen del presidente y a todas las ideas que provengan del partido Republicano, en el discurso sobre el Estado de la Unión pudimos ver como reaccionaban ante las lecturas que reflejaban como el país dirige su rumbo a un mejor momento.
Si entre los resultados hay uno que menciona el bajisimo indice de desempleo y que ha ocasionado una disminución en el uso de estampilla de comida, ese punto tiene que alegrar a todos los presentes y expresar su alegría como se hace en esos casos, ponerse de pies y aplaudir, ese es uno de los casos, pero no fue el único.Simplemente fue muy evidente que el presidente se destaco en su trabajo y que esos resultados de las encuestas sobre el rumbo del país no debe ser de un 20% como lo estamos viendo, tampoco es verdad que el presidente tenga una aceptación de un 40% como promedio, ya hemos podido ver como se manejan esos resultados, cuando el presidente acumula resultados de 45% o mas se avecinan algunos de encuestadoras muy opositoras al presidente, donde los resultados apenas llegan al 38%, eso hace que el promedio baje al indice donde el partido Demócrata se siente cómodo.
Estoy seguro que ayer fue una noche inolvidable para un presidente que apenas ha podido ocuparse de sus asuntos, cuando tiene una oposición librando una encarnizada lucha por derrocarlo, pero no importa, nosotros los Republicanos aprendemos muy rápido, si bien ese no es nuestro estilo, tendremos que usar las mismas armas cuando tengamos la oportunidad, sera difícil hacerlo, no constamos con esas habilidades para sacar esos bajos instintos cuando se trata de opositores no de enemigos, ese es el punto donde los Demócratas no saben diferenciar.
Podemos hacer un articulo muy bueno solo con las caras de los Demócratas en esa reunión. La Pelosi no podía mas, agoto todas las expresiones fatalistas, negativas y repugnantes, la ultima fue como si probara una tajada de limón, el senador Socialista Sanders se le podía notar su hipertensión, el esperaba que para este tiempo ya Donald Trump estuviese triturado, no recibiendo aplausos.
